Japón. Siglo XVI. Una pequeña aldea vive hostigada de forma continua por un peligroso grupo de bandidos, hasta el momento han logrado sobrevivir a duras penas, pero el temor se apodera de sus habitantes cuando descubren que serán atacados nuevamente tras la próxima cosecha, justo antes de que llegue el invierno. La situación se torna desesperada, y los campesinos, tras consultar con el anciano más sabio del lugar, han tomado una decisión, su futuro estará en manos de los samuráis que puedan contratar para proteger el pueblo.
Hace algún tiempo contraje una deuda con el cine asiático, concretamente con los grandes clásicos que le han dado prestigio desde los primeros pasos de su existencia, y qué mejor manera de empezar a pagar, que debutar con un título como "Los Siete Samuráis", de Akira Kurosawa. Corría el año 1954, el conocido director japonés ya había saboreado las mieles del éxito con "Rashomon" e "Ikiru", y su particular estilo, dictatorial, según algunos, debido a su afán por la búsqueda de la perfección, estaba a punto de ofrecernos una producción que es considerada, con sorprendente unanimidad entre crítica y público, como una de las grandes obras maestras del cine en toda su historia.
- "¿Os sabéis el chiste del tú no y yo tampoco?" -
En mi opinión la mayor virtud de "Los Siete Samuráis" es que se trata de una película que traspasa la barrera del tiempo... me explico, lógicamente la calidad visual es la que podemos esperar en un film japonés de mediados del Siglo XX, pero ahí acaba todo, por sorprendente que parezca los medios empleados para rodarla son, a mi parecer, los únicos elementos que nos hacen ser conscientes de la longevidad de este título... ¿el resto? Pura poesía concentrada, una historia sencilla pero eficaz, personajes inolvidables, un ritmo que no se permite el lujo de aburrirte durante sus más de tres horas de duración, o simplemente un guión lleno de situaciones que rayan la genialidad... aquella manida frase de "adelantada a su tiempo" va como anillo al dedo para este pilar del Séptimo Arte.
- "He bebido tanto que ya no recuerdo ni mi nombre... ¡hic!" -
Para hablar del reparto comenzaré, como no podía ser de otro modo, con los samuráis que defenderán la aldea del ataque de los bandidos. Sin seguir un orden concreto en primer lugar empezaremos por el designado como líder del grupo, Kanbei (Takashi Shimura), la estrategia es su mejor arma, lo que no evita que, cuando la situación lo requiera, el arco o la espada se conviertan en una extensión más de su cuerpo, su ayuda para dar con el resto del grupo será vital. Junto a él encontramos a Katsushiro (Ko Kimura), un joven aspirante a samurái que tras ver en acción a Kanbei no dudará en seguirlo a donde sea necesario para conseguir que sea su maestro. El miembro más llamativo del equipo no es otro que el tipo con aspecto descuidado que carga con una espada enorme... su nombre es Kikuchiyo (Toshiro Mifune), un temperamental guerrero que intenta en todo momento demostrar su valía, lo que le convierte en el protagonista de los momentos más divertidos y surrealistas de la historia. Shichiroji (Daisuke Kato) es un viejo amigo de Kanbei que no dudará en unirse a él en esta particular cruzada, un soldado experimentado que ha visto la muerte demasiado cerca. Gorobei (Yoshio Inaba) es un habilidoso luchador que les acompañará en la misión en pro de los campesinos tras un fugaz contacto con Kanbei, él mismo será el responsable de la llegada al grupo de Heihachi (Minuro Chiaki), no hay mejor descripción que la realizada sobre él mismo por Gorobei: "Con la espada es de segunda, lo cierto es que tiene un gran carácter, es un buen hombre, y alegre... una buena compañía en la adversidad..." Por último y no por ello menos importante tenemos a Kyuzo (Seiji Miyaguchi), el samurái por excelencia, sólo vive para mejorar en el arte de la espada, punto. La mayoría del resto de personajes, cuya calidad no desentona con respecto a los anteriormente mencionados, son aldeanos como Rikichi (Yoshio Tsuchiya), el mayor defensor de la idea de contratar guerreros como protección, Manzo (Kamatari Fujiwara), un importante campesino que desconfía de los samuráis, su presencia le hace recelar por la seguridad de su bella hija, Shino (Keiko Tsushima), o el anciano Gisaku (Kokuten Kodo), su sabiduría le rebosa, y cada una de sus frases es una buena muestra de ello. La banda sonora no se queda por detrás del conjunto, orquesta con ritmos orientales donde predominan las trompetas (sobre todo en su tema principal) y los tambores, los coros también tendrán su oportunidad de redondear una joya como esta.
Los expertos en la materia podrían pasarse horas y horas, o líneas y líneas, diseccionando una obra de este calibre, por mi parte simplemente añadir que maldigo todo el tiempo que esta película ha permanecido aparcada en mi lista de pendientes, si te gusta el cine con mayúsculas no tendrías ni que pensártelo, la sensación de satisfacción tras su visionado es máxima... en pocas palabras, la épica vista como pocas veces lo has hecho.
Frases para el recuerdo:
"Sí, ciertamente... se comportan como unos idiotas, los campesinos, son gente cobarde, siempre están preocupados por algo, cuando no es la lluvia, es la sequía... se levantan con miedo y se acuestan con miedo, menuda vida, ¿verdad? Los pobres tienen miedo hasta de su sombra..." Gisaku (Kokuten Kodo)
"En una batalla siempre se necesita una bandera." Heihachi (Minuro Chiaki)
"¡Soy un samurái!" Kikuchiyo (Toshiro Mifune)
"Estamos todos en el mismo barco... ¡el egoismo nos destruirá! Y eso... no lo toleraré." Kanbei (Takashi Shimura)
- ¡Necesito que alguien me diga que también lo ve! -
Frases para el recuerdo:
"Sí, ciertamente... se comportan como unos idiotas, los campesinos, son gente cobarde, siempre están preocupados por algo, cuando no es la lluvia, es la sequía... se levantan con miedo y se acuestan con miedo, menuda vida, ¿verdad? Los pobres tienen miedo hasta de su sombra..." Gisaku (Kokuten Kodo)
"En una batalla siempre se necesita una bandera." Heihachi (Minuro Chiaki)
"¡Soy un samurái!" Kikuchiyo (Toshiro Mifune)
"Estamos todos en el mismo barco... ¡el egoismo nos destruirá! Y eso... no lo toleraré." Kanbei (Takashi Shimura)
PD: Aquí tenéis una segunda opinión.
- "Me he quedado sin palabras... impresionante." -
8 comentarios:
Congo.
Dudo en poner "mi gran amigo Joe" por el tema "simio bucólico mirando a la montaña", pero me decanto por la que he puesto arriba por el tamaño del mono y porque no tiene la espalda plateada : )
Desde luego... con la de pelis con mono que hay... y yo pensando que estaba subiendo el listón, ¡la semana que viene culo o codo! jajaja. En fin, gracias por participar, esperando recomendación Ismael...
Saludos
Muy buen artículo, me ha encantado, estoy deseando ver la película.
Ja ne!!;)
Me encantaría poder decir algo sobre los 7 samurais... pero me temo que cuando la vi estaba muy sesgado personalemnte, y simplemente me pareció "buena peli", así que pare hacerle justicia, la pongo en mis pendientes.
Respecto a tus deberes: "Adaptation: El ladrón de orquídeas".
Gracias por tu comentario Eskalina.
Espero que si le das una nueva oportunidad puedas pasarlo tan bien como lo he hecho yo Ismael, buena recomendación por cierto. Recordad que Los Siete Samuráis fue la primera propuesta del Guardián, y menuda propuesta... jejeje.
Saludos
Vi la película hace poco y me encantó. Y menos mal, porque me quitó el mal regusto que se me quedo después de gastarme más de 7 € en ver la GRAN MIERDA de 47 Ronin.
Gran artículo y gran blog. Felicidades!
Hola Juanmi, muchísimas gracias por tu comentario... el blog lleva muerto casi un año pero todavía me da alguna alegría, jajaja.
"47 Ronin" pinta horrorosa... gracias por confirmarlo por aquí, es mejor ver de nuevo esta obra maestra.
Saludos
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